The Diary Game III - 24/06/2025 - Día de polillas y lunas

Hola querido Thediarygame, hoy empecé con el pie derecho, porque al salir a dejar a Iris para que se fuera en su ruta de guardería, me encontré una polilla. Y es que a mí estos animales me encantan, porque su color, su forma y su importancia para el ecosistema es algo que no se pueden dejar pasar. Yo sé que hay polillas en todo lado, pero, suelen ser muy pequeñas, aunque te cuento que en fotografías macro estos animales se ven espectaculares. También hay polillas grandes, incluso hay algunas que parecen mariposas pero son polillas, no siempre son lobregas y las hay llenas de color. Volviendo a mi historia, vi la polilla en medio del asfalto gris que estaba emparamado porque no ha hecho más que llover, el problema es que estaba en plena calle por donde entran y salen los carros del condominio.

No podía dejarla ahí, este animal escogió un mal lugar para dormir, asi que le tome sus fotos y la corrí con una hoja hacia el anden, donde espero duerma tranquila hasta la tarde que se levante a polinizar je, je. Esta amiga es de la especie Coronidia canace considerada común y que no se encuentra en peligro, pero el hecho de que no esté en peligro no quiere decir que la voy a dejar morir. Sus alas son un camuflaje perfecto porque simula un tronco, quizás muchas veces hemos pasado junto a estas polillas que se quedan adheridas a los árboles y que con su camuflaje perfecto pasan desapercibidas. La pobre hoy, no supo escoger el lugar ideal para dormir, quizas el pavimento mojado, que se ve mas oscuro las despistó. Pero, llegué yo, la super salvadora de polillas y la puse a salvo con la esperanza de que estará bien y podra continuar polinizando. Tras este momento mágico, entre a casa y me preparé mi desayuno, arepa y queso.

_{Mascarilla de plata que me hizo creerme la Luna}

Después de desayunar, me dio por ponerme una mascarilla en la cara, aprovechando que estoy sola y nadie me verá (esto es gracioso porque ahora mucha gente me ve en esta foto ja, ja). La mascarilla es de plata, solo la he usado una vez porque retirarla es muy complejo, pero hoy estaba optimista así que me lavé la cara y me puse mi mascarilla de plata que me hará jóven en cuestión de 20 minutos, logrando una apariencia de quinceañera. La mascarilla es espesa, parece pegamento, pero la coloqué en mi cara y comencé a contar el tiempo. Mientras tanto, me creía la Luan, es que llevaba la cara con color plata y brillaba, parecía una joya andante, es que este podría ser un buen disfraz para Halloween, con la cara plateada como la Luna y podría dibujarme algunos cráteres con pintura oscura...no sé diga más Habemus disfraz de Luna para el 31 de octubre.

Listo y pasó el tiempo, empecé a despegar la mascarilla, hubo partes que salieron bien, pero otras que no, que se adherian a la piel como Vemon en la película. Trate de retirar lo que más pude, con la convicción de que al entrar a la ducha, la plata se iría y yo saldría reluciente. Use mucho jabón por si acaso y al salir de la ducha y mirarme en el espejo, seguía dorada, no me quedó más que gritar "Nooooo, vida cruel, ya no hay respeto por el adulto mayor". No podía quedar color plata por el resto de la vida, así que con agua micelar me terminé de retirar la mascarilla. Siempre digo que no vuelvo a usar esta mascarilla, pero, como la voy a desperdiciar, por eso la uso pero definitivamente es muy difícil de retirar.

_{Iris sacando sus snacks de la maleta}

_{Mi cena, arepa con queso}